viernes, 22 de mayo de 2009

El 2x1

Las rebajas también han llegado a Somosaguas y como detalle de despedida en mi último bloque (en la parte basal al destriparlo en busca de esquirlas) encontré una grata sorpresa de la que os hablaré en un ratito.

Comencemos por el gran protagonista de este bloque, SOM-N'07 (408): el premolar de Gomphotherium.


Se trata de un premolar casi completo al que sólo le falta una pequeña parte del extremo de una de las raíces, que muestra unas crestas bien definidas con algo de desgaste (sobre todo hacia los laterales) y que conserva parte del esmalte en un perímetro de aproximadamente 1 cm de ancho.

Las raíces presentan fracturación, una de ellas antigua y rellena de sedimento y la otra producto del uso insuficiente del consolidante por parte de esta principiante en la limpieza de fósiles. Una parte de esta raíz mal consolidada prácticamente se desintegró al tratar de extraerla (en la foto de la izquierda se puede ver la colección de fragmentos que quedaron), y aun tras un largo e intensivo proceso de reconstrucción (más parecido a montar un puzzle de pequeñísimas y numerosas piezas difíciles de manipular) una parte de los fragmentos fueron imposibles de reubicar y ahora se hallan agrupados en un tubo de cristal.

Aquí os dejo una foto en detalle de la "Zona O" tras mis esfuerzos reconstructivos:


Esta es la pinta final que presenta el premolar y cia. La gran fractura que se aprecia en la raíz derecha es la más antigua y rellena de sedimento, su compañera de la izquierda es la que ya había perdido su parte final y la que sufrió mi inexperiencia.


Y ahora, el momento más esperado, la presentación de nuestro pequeño espontáneo, SOM-N'07 (408) (bis): el molar de Micromeryx.

Este ejemplar, de apenas 1.2 cm de altura y 0.5 de ancho máximo, perdió antes de la fosilización una raíz al completo y una pequeña parte de la corona y muestra un elevado desgaste que ha hecho desaparecer las carenas. Aun quedan algunos retazos de esmalte rodeando la corona a ambos lados de su única raíz.










Por otro lado, se ha llegado a contabilizar una gran cantidad de esquirlas ajenas a ambos fósiles, la mayor de ellas de 2.2 x 2.6 cm, a lo largo y ancho de todo el bloque. Pero el descubrimiento más interesante, y además sin contacto con las muestras principales, es sin duda la presencia de nódulos de carbonato redondeados (el menor de 3 mm de diámetro) y en forma de coliflor (de 8 mm de diámetro y cuya forma está perfectamente definida). Estas morfologías acolifloradas parece que se forman típicamente en cuevas.









Y hasta aquí mis fósiles, si con un poco suerte sale adelante un pequeño proyecto que tengo entre manos puede que os de una sorpresilla y volvamos a vernos por aquí ;)

2 comentarios:

  1. Muy bien, María! Este trabajo es un ejemplo de esfuerzo recompensado y de aprendizaje activo y participativo. Enhorabuena!!

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  2. La verdad es que sí que he aprendido muchísimo con esta pieza, por suerte no todo a las malas XD

    Esta ha sido la primera vez que he trabajado en limpieza de fósiles y la experiencia me ha encantado, así que espero que no sea la última :D

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